Atrapada, Capitulo 3

Atrapada

Capitulo 3, “Encuéntrame…”

Había pasado ya más de un mes y aunque pareciera imposible las cosas iban mejorando.

 Todo en realidad estaba mejorando de a poco, y esto sinceramente me alegraba demasiado, Savannah y yo nos encontrábamos mucho mas unidas, nos llamábamos al salir del instituto incluso aunque pasábamos todo el día juntas allí, mi padre iba a buscarme regularmente al instituto ya que yo no poseía licencia de conducción, los exámenes para aprobarlas en Forks estaban programados para dentro de un mes aproximadamente, en lo que a mi respecta aquello estaba demasiado lejos.

Las cosas se habían hecho mucho más cómodas para mí.

Necesitaba pasar página, como fuese.

A mi madre por otra parte parecía habérsele calmado sus constantes miedos con la presencia de Steve, mi hermano mayor, quien me había llamado para comunicarme que dentro de 1 semana justo cuando comenzaban las vacaciones de verano vendría  verme y a pasarse unos días con papa, supongo que él lo echaba de menos, siempre lo echo de menos, el y yo lo sabíamos solo que el a diferencia de mi no quería aceptarlo.

Ese era el único problema de Steve, él nunca lo aceptaba.

Papa había decidido comprarme una auto, solo que aun no habíamos pensado lo suficiente en ello, mi padre era un hombre solo, realmente solo. Descubrí en esas tres semanas que llevábamos juntos que me necesitaba, necesitaba mi compañía.

Todos los días antes de ir a la escuela trotaba un poco, solo que como todo ejercicio poseía sus dificultades, estas se incrementaban al practicarlos en Forks, resbalaba constantemente por lo que varios hematomas se habían acoplado y hecho parte constante de mi cuerpo, el llevar la cazadora puesta al momento de trotar era específicamente incomodo, habían días en que solo usaba un suéter de mangas largas y corría, solo que al momento de volver a casa estaba totalmente empapada, era cierto… la lluvia aparecía en el momento menos oportuno.

Había algo mas para mí allá afuera, algo me lo gritaba, quizás solo debía esperar.

-¡HEY, SOPHIA!- Escuche como alguien gritaba tras de mi, voltee lentamente para tan solo encontrarme a un alto, fornido y muy bien parecido rubio.

-mmmm, ¿Matt no?- Pregunte como si lo hubiera olvidado, cuando a decir verdad no lo había hecho el solía recordarme a Liam, al escuchar como pronunciaba su nombre sonrió y fue entonces cuando sentí mis rodillas temblar al ver aparecer sus hoyuelos, estaba loca, era una cosa a la que estaba acostumbrándome, pero ver el mismísimo retrato de Liam frente a mi, era algo fuera de lo común…

-Si, el mismo.- respondió el, ensanchando aun mas su sonrisa lo cual a mi parecer, era casi imposible.

-Así que… ¿Qué quieres?- pregunte tratando de zafarme de él y de su atrayente y hermosísima sonrisa que estaba causando estragos en mi interior y des embotellando recuerdos escondidos hacia mas de un mes.

-¡Valla! Chica directa, me gusta- dijo el haciendo que mis mejillas se sonrojaran- En fin el punto es que quería saber si quizás quisieras venirme a ver jugar después de clases y luego podríamos salir a dar un paseo.- me espeto el de repente, no pude evitar sonreír ante su carita tan tierna, estoy totalmente segura que la mitad de las chicas de Forks habían cedido tan solo por ser el, y la otra mitad por esa cara.

-Gracias, pero no estoy interesada.- respondí tajante, dándome a la vez la vuelta para ir directo a mi ultima clases, Savannah sufrió una fuerte gripe el día de hoy y por lo tanto se ausento y ante su ausencia estaba aquí sola, desamparada.

-¡¿Qué?!- pregunto el, tras de mi, aparentemente confundido, estoy totalmente segura de que no era el tipo de chico acostumbrado a recibir negativas de parte de las chicas.

-Lo que haz escuchado no me interesas- le respondí fríamente mientras que abría la puerta de mi salida de clases.

-¡Te interesare Sparks! ¡ES UNA PROMESA!- Grito prácticamente frente a media escuela haciendo que mis mejillas se tintaran de un rojo carmesí.

-Lo que digas- fue lo único que pude contestar ante eso.

Al acabar las clases supe automáticamente que poseía serios problemas, papa me había llamado a informarme que no podría pasar por mi debido a la tormenta que estaba desatándose en Forks y si que era una tormenta, el cielo negro solo era sinónimo de “oh, oh”, y supe que estaba perdida y aun mas con la ausencia de clases de Savannah, menudo día asqueroso.

Siguiente problema del día, no tenia idea de como volver a casa ya que mi padre no vendría a buscarme hoy y Savannah no había venido, GENIAL, estala S.O.L.A, y se sentía fatal, Salí hacia la tempestad que se desataba afuera empapándome totalmente cuando de repente la bocina de un auto sonó directamente en mis oídos aturdiéndome por unos segundos, un despampanante volvo se instalo frente a mi y vi como la ventanilla del conductor se bajaba.

-Hola- quede impactada al ver que Renesmee estaba dentro, saludándome… a mí.

-Hola…- respondí un poco dubitativa y…. empapada, totalmente empapada.

-¿Necesitas un aventón?

-No- respondí enseguida, estaba mojada, sola, en medio del instituto mientras probablemente todos se burlaban de mi, al menos me quedaba un poco de dignidad y orgullo.

-Esta bien, Adiós- dijo ella mientras que arrancaba poco a poco el auto y subía automáticamente la ventanilla.

-¡ESPERA!- grite desesperada, ¡a la mierda el orgullo y la dignidad, quería sobrevivir de una pulmonía!- solo… ¿quizás?- le pregunte mientras ella volvía a bajar la ventanilla.

-Sube- me ordeno ella simplemente mientras rodeaba el auto y subía al asiento pasajero.

-Lindo auto- murmure una vez que estaba dentro, era uno de sus autos despampanantes, lo siento pero sinceramente el de mi padre era mejor ¡ja! Toma eso Swan, serás perfecta pero el auto de mi padre es mejor que le tuyo, patético, hablaba del auto de mi padre porque yo no tenia uno propio.

-Si, papa ama los coches- contesto ella con una mueca parecida a una sonrisa mientras que miraba fijamente la carretera.

-¿Eres la hija del jefe Swan?- pregunte un poco confundida, esta chica era un total misterio en la escuela.

-No… solo soy su sobrina, su hija es… Bella.

-Ohh, ya veo- respondí procesando la información, ¿Quiénes serian sus padres?

-¿Qué tal te ha tratado Forks?

-La verdad… es un poco… monótono- respondí siendo sincera, a veces la rutina me aturdía, era totalmente estresante.

-¡JA! ¡haz dado en el punto exacto!- grito ella emocionándose de repente.

-¿En el punto de que?- pregunte realmente confundida, esta chica estaba realmente loca.

-Mira… la verdad es que estoy aquí porque necesito pedirte un favor- respondió ella como si fuera la cosa mas normal del mundo, ¿se habría golpeado la cabeza?-Jamás pensé que haría esto pero… aquí vamos…. Ellos son casi todos chicos, son como 20 más o menos, y solo somos 7 chicas, todas las fiestas son ¡HORRIBLES! Porque las chicas que van son las parejas de algunos, y los otros 13 siempre quedan solos, así que, prometí invitar a unas amigas- dijo mientras un furioso tono rojo inundaba su cara, como si estuviera confesando un intento de asesinato, -Pero como ya te habrás dado cuenta no tengo ninguna- en ese momento me sentí realmente triste por ella- todas las chicas son… inadecuadas y es un poco penoso para mi, por eso quería saber si decidías acompañarme- termino por fin.

-¿Estas invitándome a una fiesta o algo así?- pregunte aun confundida.

-Si…

-¿Cuándo?

-Es este domingo, en la playa de la Push, será divertido- respondió ella con una gran sonrisa en su cara.

-¿Por qué me lo pides a mi?- solté de repente.

-Ya te lo he dicho… en el instituto las chicas no son el tipo de chicas que hablarían con mis amigos- dijo concentrada mirando fijamente la carretera a través de la lluvia mientras conducía.

-¿Y se supone que yo soy…?

-¡NUEVA!- respondió ella como si fuera la cosa más natural del mundo.

-¿Y que cambia eso?- pregunte aun perdida.

-Eres interesante- contesto encogiéndose de hombros, restándole importancia al asunto.

-¿Te lo parezco?- pregunte de repente a gusto con el rumbo que había tomado la conversación.

-Por alguna extraña razón estoy aquí hablándote y diciéndote que vallas a la fiesta.

-Tú nunca has hablado conmigo, ni siquiera sabia que sabias que yo existía- respondí.

-Que no te hable no significa que no sepa que no exista.

-¿Puedo llevar a alguien?- pregunte.

-Si es un chico no, ya ellos son demasiados- dijo ella a la vez que se reía- ¿entonces vendrás?- pregunto apartando la mirada de la carretera y posándola sobre mi.

-Quizás…- respondí, debía decirle a papa, pedir permiso o una mierda de ese tipo.

-Por favor si que si, le agradaras a- ella corto de repente al ver su celular sonando, sobre el salpicadero del coche- al estúpido que esta llamando, ¿podrías contestar?- dijo de repente.

-Claro…- respondí- Hola…- conteste con mucho cuidado su teléfono táctil y una melodiosa y masculina voz pregunto al otro lado de la línea

-¿Ness?

-No, ella esta conduciendo- respondí.

-¿Quién habla ahí?

-Sophia

-Lindo nombre…

-¡Lo que digas!

-Lindo temperamento…

-Diría que tu voz es linda pero generalmente no miento- y si allí, en ese instante estaba mintiendo, su voz era de lo más… sexy.

-Eso ha sido un poco rudo.

-Yo te enseñare lo que es rudo…

-Oh si claro, ¡y yo me convertiré en un lobo no te digo!- el idiota del otro lado dela línea rompió a reír de repente, incluso su risa era de lo mas despampanante.

-¡Genial! Entonces quizás… solo quizás deba alejarme de los tres cerditos

-¡Haz dado en el clavo!

-Si, generalmente lo doy…

-Presumida… Dile a Renesmee que me llame

-Lo hare- le asegure- ¿Cuál es tu nombre?- pregunte.

-Lo siento, debo colgar.

-Ok, Adiós- conteste, quizás el estuviera en la fiesta.

-Le agradas a Embry- respondí Renesmee.

-Gracias, Ohh esa es mi casa- le dije de repente señalándosela.

-¡Genial! ¿Iras? Por favor…- me dijo haciendo un puchero, tratando de parecer desamparada.

-Dame tu celular y toma el mio- dije de repente ofreciéndole mi celular, tome su móvil de el salpicadero y registre mi numero, ella me devolvió mi celular, nos despedimos con un simple adiós.

Al entrar a casa con pasos despreocupados entre a la cocina, prepare algo para la comida sin ser consciente realmente de lo que hacia, me senté a comer aun ensimismada en mi interior, al finalizar y lavar los platos llame a Savannah con la intención de invitarla a la fiesta, ella solo contesto “me siento fatal”.

Entre a la habitación y puse un poco de música en mi IPod, dispuesta a relajarme y a refrescar mi cabeza, de la mochila saque mis libros dispuesta a hacer los deberes, y si… es patético pero en mi defensa, vale…. No hay defensa, solo que estaba demasiado aburrida.

Liam…

Poco a poco el abandonaba mis pensamientos, y aunque suene un poco extraño, obsesivo e incluso psicópata luego de un mes, poco lo recordaba y aquí viene lo peor, aquellos dolía…

El pensar que allí había acabado todo, que él nunca se esforzó en buscarme, en… explicar, era demasiado doloroso.

Me deje caer sobre la cama realmente cansada, confundida, con un lio mental demasiado grande para mí, demasiado grande para afrontarlo ahora.

‘Use somebody’ comenzó a sonar en mi reproductor y allí acabo todo, llegue a un punto muerto de mi subconsciente que me arrastraba a sus adentros como el agua arrastra la arena tras una ola forzosa y agonizante.

La carretera era fría, un poco mas allá de lo común aquí en Forks, todo era tan gélido y glacial, en el aire se colaban los colores azules, blancos y grises dejando a un lado el particular verde y sobre mi pequeños copos de nieve caían, mire hacia mi lado derecho teniendo el pleno conocimiento ahora de donde me encontraba, mire hacia el bosque y fue cunado le vi, aquella mancha gris con pequeños lugares dorados estaba allí detenidamente y yo me encontraba estupefacta en mi lugar, petrificada totalmente.

-Sophia…- escuche como ese algo susurraba con una voz masculina y sensual un poco mas allá de lo común y sin pensarlo camine hacia allí, era consiente de que aquella cosa estaba contabilizando cada uno de mis pasos y luego cuando estaba a menos de un metro de distancia se alejó.

Camine más cerca de él, decidida a alcanzarlo, pero entre mas cerca me encontraba mas él se distanciaba.

Estaba cansada de ese juego de perseguir y él lo percibió y a que se quedo estático mirándome y de repente desapareció, miedo… esa emoción se apodero de mi pero despareció instantáneamente cuando unos brazos tan ardientes como abrasadores me envolvieron por mi cintura, no lograban quemarme pero si enviar corrientes eléctricas a donde quiera que me tocaran, no podía verlo debido a que mi espalda estaba pegada a su pecho, pero si que podía sentirlo, cerré mis ojos automáticamente cuando sus candentes labios empezaron a besar la base de mi cuello.

-Mmmm….- gemí mientras sus grandes manos tanteaban mi estomago.

-Te quiero…- susurro en mi oído antes de empezar a besarlo y mordisquearlo.

-¿Quién eres?- pregunte con otro gemido.

-Descúbrelo- respondió con un voz burlona, subiendo sus manos por mis costado hasta el punto de tocar mis senos.

-¿Dónde estas? Necesito encontrarte.- dije sonando desesperada con lagrimas en mis ojos ahora.

-Cerca…- tomo mi mano y puso un trozo de papel allí.

-Estaré esperándote rubia… encuéntrame- dijo antes de besar mi cuello para luego sin mas desaparecer.

Tome el trozo de papel y rápidamente lo abrí.

“la Push”

Estaba allí escrito con una perfecta letra cursiva, escuche sus pasos cada vez mas lejos y sin pensarlo corrí hacia él.

-¡Espera! ¡Espera! ¡No te vallas! ¡No me dejes!

Desperté abruptamente, siento como las palmas de mis manos sudaban mientras que un intenso dolor se instalaba en la boca de mi estomago.

-No me dejes… te necesito- susurre sin fuerzas antes de llorar, mire rumbo a mi nochero y vi mi celular allí… esperando por mi…

Sin pensarlo dos veces marque su número.

-¿Sophia?- respondió.

-Hola, Renesmee, ¿a que horas vendrás por mi?- pregunte.

-¿Iras?- contrataco ella suprimiendo un bostezo.

-Si…- afirme mientras que una sonrisa se dibujaba en mi cara.

-Genial, pero… son las dos de la mañana.

-Aun así, ¿A que hora pasaras por mi?- pregunte ansiosa, necesitaba verlo, encontrarlo a como diera lugar.

-¿A las 7 te parece bien?- pregunte ella.

-Si, te espero…

-Vale…- y sin decir mas colgó, me refugie en mis mantas, pensando en el, en sus manos, en su olor.

Era sábado, Papa me llevo hasta una tienda de víveres a comprar unas cosas esenciales que hacían falta en casa, debido a sus largos turnos de trabajos pasábamos un muy escaso tiempo a solas en el que tan solo solíamos discutir acerca de cosas insustanciales, como lo era mi estadía en Madera y sé que le dolían ciertas cosas cuando se las contaba, como los cumpleaños solitarios de Steve, los cuales siempre se los pasaba en la playa mirando hacia el horizonte o tomando fotografías, a papa esas simples cosas le afectaban demasiado así que yo trataba de no mencionarlas pero el insistía constantemente, la fotografía era algo que siempre practicaba papa cuando aun vivía con nosotros, incluso yo conservo un montón de viejas fotografías que él tomaba y que siempre me pareció que tenían magia, Steve por su parte solo conservo una donde estaban el y papa con el océano como escenario, Steve siempre fue el mas perjudicado con la huida de papa, siempre evitaba su nombre pero siempre conservo esa fotografía, y siempre practica sus hobbies, también solíamos hablar de nuestros múltiples viajes a diversos lugares, como a la estatua de la libertad, o el gran cañón.

Papa conservaba fotos nuestras en su habitación y lo supe debido a que un día por primera vez desde que estaba aquí decidí entrar a su habitación a limpiar y al ver las paredes mi corazón pareció detenerse, las paredes estaban repletas de fotos, de…. Todos.

Steve, yo, incluso… mama; y creo que esa fue una de las cosas mas dolorosas que he vivido.

Todo el camino a casa miraba por la ventana el bosque y tan solo pensaba en lo solo que el podía sentirse, en las noches al llegar de su turno en el hospital, entraba a mi cuarto a asegurarse de que aun estuviera allí, y siempre cantaba para mi o besaba el tope de mi cabeza, e imagino que esa es su forma de recuperar el tiempo perdido.

Aunque allí esta la gran diferencia…

El tiempo esta perdido.

-Papa…- musite.

-Dime…

-Tengo una fiesta- afirme.

-¿Cuándo?- pregunto el levantando una ceja.

-Hoy…- sentencie.

-¿Dónde?

-En la Reserva de la Push- dije mientras que una sonrisa se extendía en mi cara.

-¿Quién cumple?- dijo mirándome brevemente.

-El amigo de una amiga…- susurre, preguntándome si renesmee era ciertamente mi amiga, bueno, eso creo.-¿Cómo se llama tu amiga?- acaso hoy se había levantando mas curioso que de costumbre.

-Renesmee Swan…

-Ohh una Swan…- susurro el.

-Si…- afirme.

-Ya veo… puedes ir- dijo mirándome mientras que una sonrisa se esparcía por su cara.

-¿En serio?- pregunte confundida, no sé que esperaba de él, pero no esperaba esto.,

-Siempre estas aquí… diviértete un poco-me dijo sonriéndome.

-Gracias…- conteste atontada.

-¿Te gusta el chico de la fiesta?

-¡¿Qué?!- Pregunte mientras que sentía la sangra invadir mis mejillas.

-Que si te gusta- repitió como si fuera lo mas normal del mundo.

-No… es solo un chico con una fiesta- respondí hundiéndome en mi asiento del coche.

-Bien- susurro.

-bien…- repetí.

El coche pareció estremecerse y de repente unos extraños sonidos comenzaron a salir del capo, directamente desde el motor, esto alentó a papa y por ello estaciono a un lado de la acera en plena carretera, yo sin pronunciar una sola palabra me limitaba a observarlo.

Abrió la puerta del asiento piloto y la cerro tras de el con tan solo un golpe sordo, desvié mi mirada y la fije en la profundidad del bosque desde mi ventanilla, verde, verde…

Verde con diferentes matices a donde quiera que mirara, abrí la ventanilla dejando que el aire glacial se introdujera en mis fosas nasales, haciéndome estremecer, cerré mis ojos y aspire con fuerza, hoy era uno de aquellos días especialmente glaciales en Forks extraño, estamos a comienzos de Julio.

Al abrir mis ojos luego de un momento algo había cambiado en el panorama y lo pude notar instantáneamente, es como si siempre hubiera estado allí frente a mi, un pelaje gris oscuro con manchas doradas en su lomo se destacaba sobre el sutil verde, tomando consigo todo el protagonismo de la escena, se encontraba de perfil, mirando un lugar especifico, era un animal demasiado alto, quizás fuese un caballo, demasiado grande, quizás un oso y con las facciones demasiado caninas y atrayentes…. Quizás, tan solo quizás…

UN osocaballolobonoidentificado.

Ok, quizás no, quizás tan solo era un…

Lobo.

De repente deje de observar aquella estampa tan atrayente para mis ojos, mi padre y su seguridad inundaron mi cabeza por completo, mire por el parabrisas del automóvil y allí estaba el, trabajando en el motor, tratando de sacarnos fuera de esta pequeña y baldía calle del demonio.

Conduje mi vista demasiado deprisa hacia aquel animal y el ya no estaba allí, había desaparecido tal cual había llegado, es como… como si nunca hubiese estado allí.

“Solo es una alucinación”, “Solo es una alucinación”, “Solo es una alucinación”, se repetía en mi cabeza una y otra vez, constante e incesantemente, ¿Qué coño había sido aquello?, mi corazón palpitaba estruendosamente como si mi vida se me fuera en ello y las palmas de mis manos sudaban como posesas, con mis manos temblorosas y un poco torpes logre subir rápidamente la ventanilla y me concentre en controlar mis irregulares respiraciones.

Mi padre volvió al instante al asiento piloto.

-Cariño creo que debo llevarlo al mecánico.

¿Acaso debía decírselo?, no, definitivamente no, el sin duda pensaría que esto loca, y es que…

Probablemente lo estoy.

Pisando el acelerador arranco el auto, alejándome de allí, alejándome de aquella cosa gris con manchas doradas en su lomo.

Cuando llegamos a casa mil preguntas rebotaban en mi mente a mil por hora, con una rapidez inconcebible, tanto así que no alcanzaba a racionalizar bien del todo aquello, ¿Qué fue eso? ¿Estoy loca? ¿Me habría comido? ¿Acaso hubiese yo querido que me devorara? ¿Estoy alucinando? ¿Qué hora es? ¿Qué hare de cenar hoy?

Y así continuaban una tras otra, al final y sin poderlo aguantar por mucho tiempo mas decidí comprar pizza y comerla junto a mi padre a sabiendas de que el me miraba detenidamente.

Si papa, haz creado un monstruo.

NOTA DE LA AUTORA:

HOLA, HOLA, HOLA, HOLA GUAPURAS!

¡Aquí esta Nat como siempre! ¿Creían que había muerto? ¿Desaparecido? ¿Qué me habían secuestrado los aliens? ¿Qué Jacob al fin vino a buscarme y me llevo a Forks? ¿Qué me había caído en el hueco de Alicia en el país de las maravillas? ¿Qué me convertí en el gato de Cheshire? ¿Qué Willy Wonka me llevo a la fábrica de chocolates? ¿Qué ayude a buscar a Nemo? ¿Qué me uní a  la manada de Timón y Pumba?

¡PUES NO! Aquí estoy otra vez mas, me he ausentado porque estoy en vacaciones de verano, y Bueeeeeeeeee…. ¿Qué puedo decir? Quedan demasiados pocos días así que debía aprovecharlos, debía dedicarles tiempo a mis mejores amigas… (Tengo una ajetreada vida social, Vale, estoy mintiendo.)

¡Pero al fin tuve un espacio y escribí! Este cap en mi defensa es mas largo de los que regularmente suelo hacer :D

Por allí alguien me pregunto que ¿Cuál es mi personaje favorito?

Vale, me han dejado esa preguntilla en face y no se a que se referían, ¿personaje? ¿Qué tipo de personaje? ¿Cuál personaje? ¿de la saga crepusculo? ¿de la farandula? ¿del mundo?

Ok, lo siento estoy estresada, querida amiga, ¡tu! Que preguntaste te responderé…

Como no has especificado, creo, supongo, infiero que es de la saga crepúsculo asi que aquí va mi respuesta….

¡ES JACOB!

Si, lo se, es MEGA RARO! La mayoría de las personas piensan que soy team Edward pero no lo soy, soy Team Jacob, después de New Moon confieso que seguí leyendo la saga por el, al igual que las películas yo simplemente lo amo *---* (Algún día seré la señora Black).

En Fin, La próxima semana montare una nota sobre mi :D para responder a lo que vosotras queráis, LO QUE SEA SOBRE MI! Yo lo resondere, LO JURO!no lo se, quiero que me conozcan, Si alguien tiene una pregunta, escríbela aquí abajo!

En los comentarios y yo POR SUPUESTO TE RESPONDERE, si tienes 80 hazlas, que no te pena, pondré mis datos personales asi que… no preguntes mi nombre y mi edad por favor,  a mi también me encantaría saber sobre ustedes :D Si te gusta lo que escribo SUSCRIBETE, SIGUEME O LO QUE SEA!

Un besote Guapuras, con Amor.

Natalie Mars.